Como parte de estos planes, los Supercars actuales pueden ser reequipados con una batería común y un kit de transmisión de entre 400 y 500 kW (540 y 680 CV), cuyo suministro se prolongará durante un periodo de cuatro años.

En un principio, los vehículos con motor de combustión interna podrán competir contra los vehículos eléctricos durante al menos uno de los cuatro años previstos, con un equilibrio de rendimiento que igualará ambos tipos de unidades de potencia. La participación de los fabricantes seguirá siendo posible gracias al apoyo de los equipos.

Paralelamente, la FIA y IMG tienen previsto lanzar un monotipo básico de categoría eléctrica llamado eRX Junior, para vehículos con tracción a cuatro ruedas con una potencia de alrededor de 250 kW/340 CV. Esta categoría contará con un máximo de seis eventos europeos, con 2021 como temporada inaugural.

En este contexto es donde se convocan las licitaciones para el suministro de:

1.      Batería World Rallycross y kit Powertrain para Supercars

2.       Suministro completo de coches y organización de campeonatos eRX Junior en un formato todo incluido de llegada y conducción

3.       Carga de energía y suministro de infraestructura

Los licitadores tienen hasta el 31 de agosto para presentar sus propuestas y pueden presentar más de una. En la próxima reunión del Consejo Mundial del Automovilismo, que se celebrará en octubre, se preseleccionarán los posibles proveedores y se hará la selección final.  

Para respaldar estos campeonatos, la FIA se ha fijado como objetivo a un importante socio de carga para garantizar que el deporte del motor siga el ritmo de la rápida evolución de las infraestructuras de carga. Esta oportunidad de asociación destaca el compromiso más amplio de la FIA de apoyar el avance de las soluciones de movilidad electrónica.